La segunda parte del viaje comienza en el mismo refugio de la federación francesa, Tras una noche en la que caímos rendidos, nos levantamos sobre las 5:30 de la mañana (la costumbre de los días anteriores).
Enseguida echamos a andar, y es que nos quedaba una larga bajada de nuevo hasta Imlil, a recoger el coche y un largo viaje hasta Todra.
Mientras bajábamos, empezamos a ver cómo era cierto que se avecinaba la "Fiesta del cordero" la más importante para los musulmanes, y que influiría mucho en nuestro viaje.
Lo primero que nos llamó la atención era la cantidad de gente que subía hacia el refugio con rebaños de corderos..
Aquí una foto Llegando a Imlil
Una vez en Imlil, negociamos una ducha en un hotel y echamos un té en una terraza y salimos hacia Todra.
Enseguida se acercó un hombre con su hija pequeña para ver si lo podíamos acercar al pueblo de al lado, ya que iban al mercado a comprar comida para la fiesta del día siguiente. Accedimos, les acercamos y les pedimos ir a comprar con ellos al mercado, toda una experiencia.
Por el camino, enseguida nos llama la atención el paisaje, el contraste del verde con el marrón árido predominande..
La tónica general al pasar por cada pueblo: Mercados y las calles inundadas de gente que iba y venía de comprar del mercado, era prácticamente imposible pasar con el coche...
Los corderos iban que volavan en las furgonetas
Ojo a la foto, no se si se aprecia muy bien, pero encima de la vaca de la furgoneta, y encima de la carga que llevaba, iba un jóven como si nada..
Para atravesar el Atlas en coche, es muy sencillo, se sube hasta arriba del todo, y se vuelve a bajar por el otro lado XD teníamos que haber sacado el altímetro en lo alto del puerto..
Conforme nos alejábamos del Atlas, paisajes cáda vez más áridos y desérticos.
Y bueno, después de 10 horas conduciendo, una vez más se nos hacía de noche, jajaja y no sin dificultades, llegamos a Todra, donde tras preguntar en varios campings, nos alojamos en el Albergue "Azul". Creo que el mejor sitio donde nos podíamos alojar, tanto por precio (muy económico), como por la hospitalidad de su dueño, Mohamed, todo un personaje, que hablaba castellano perfectamente y que nos daría que hablar en los días venideros...
Seguiremos contando!!
Salud
No hay comentarios:
Publicar un comentario